👋 Hola soy Pavel, bienvenido a una nueva 🧠 brain edition 🧠 de El Descubrimiento. Cada semana hablamos sobre producto, growth y oportunidades en el sector tech.
Estos son otras ediciones relacionadas:
Tu cerebro puede convertir la vida en un milagro o en un infierno. La elección a menudo sucede inconscientemente.
Eso se debe a que la mente tiene un software sin manual de instrucciones.
Hace unos años me encontré en un lugar oscuro por este hecho. La única manera en que puedo describirlo es que mi mente trabajaba en mi contra cada día.
Si tenía una pequeña victoria diaria de lo que fuera, mi cerebro encontraba la manera de arruinarlo.
Si tenía excesivo trabajo, mi cerebro encontraba la manera para enviarme presión y miedo.
Si quería intentar empezar con un nuevo proyecto, mi cerebro encontraba la manera de disuadirme.
Así que nunca llegué a ninguna parte, siempre tenía todo por hacer y un sabor de boca que siempre pensaba que podría haberlo disfrutado mejor.
Hasta que empecé a tomar acción.
Existe un manual de porqué actuamos como actuamos y la mayoría de nosotros no lo sabemos.
Comencé a leer libros de psicología para entender la mecánica que guía nuestras mentes.
Una de las prácticas que más me llamó la atención fue recoger y escribir los desencadenantes de mis emociones en una agenda, se llama “registrar conducta propia”.
Como un diario, pero siguiendo los siguientes patrones:
Situaciones que disparan una respuesta de malestar.
Una descripción de tu respuesta ante esas situaciones.
La definición de emociones que experimentas en un momento dado.
Un recuerdo asociado a alguna conducta problemática.
Una conclusión sobre la conducta propia.
La observación de un cambio positivo en el afrontamiento propio.
Al principio lo vi una chorrada, pero registraba una y otra vez las mismas conductas.
Con respuestas muy similares.
En mi caso, y no tiene que ser el tuyo, me di cuenta de que los vaivenes de decisiones en mi trabajo, me atacaban emocionalmente.
Todo lo que ocurría en el trabajo afectaba mis emociones y me las llevaba a casa.
Una vez localizado el problema, le puse solución.
La solución en psicología es lo sencillo, pero localizar el problema es otra historia.
En definitiva, lee sobre psicología, deja de operar en piloto automático.
Los programas que estropean tu rendimiento
Hay tres programas que te ralentizan:
Arrepentimientos
Pensamientos
Tareas
Si estos programas comienzan a ralentizar el rendimiento demasiado, existe un reinicio. Los psicólogos dicen que vienen en forma de enfoque, atención plena y escritura.
He encontrado que el trabajo profundo realizado en un estado de flujo es el mejor reinicio para mí. Todo se siente mejor después.
La mente es un ordenador diseñado para ser utilizado. La mejor manera es a través de usar tu creatividad e imaginación.
Puedes actualizar tu programación a través de nuevos aprendizajes. Puedes vaciar la papelera de reciclaje a través de la escritura. Y puedes recargar tu cerebro echándote una siesta después de comer o a través del sueño en la noche.
Estos son los hábitos para aclarar tu mente:
Menos redes sociales
Menos rumiar el mismo tema
Menos perfeccionismo
Menos procrastinación
Más paseos por la calle
Más lectura, menos Netflix
Más control en tus emociones
Más tiempo haciendo deporte
El 99% de las personas se adormecen frente a la realidad cuando el superpoder es abrazarla.
Como mejorar tu concentración
Primero, entiende esto: la concentración es como un músculo. Puede fortalecerse, pero necesitas el manual de usuario.
La psicología es ese manual.
Ahora, ¿cómo entrenamos ese músculo?
Aspira siempre a más: Atrévete a soñar grande, incluso irreal. La concentración sigue a la pasión. Si estás emocionado por lo que haces, enfocarte es fácil.
Escribe, no teclees: Tus metas, tu día a día. Algo en el acto de escribir afina la mente. Te obliga a enfocarte en lo que es crucial. A día de hoy estamos perdiendo esta habilidad y no “creamos”, sino consumimos. No hacemos trabajar al cerebro.
Aprende a diario: Cada nueva habilidad es como un ejercicio para tu cerebro. Te vuelve más ágil, más capaz de saltar de tarea en tarea sin perder el norte.
Social media: No es tu amigo cuando hablamos de concentración. Menos scroll, más foco.
Rodeado de desafíos: Si estás cómodo, probablemente estás distraído. El desafío agudiza la mente.
El fracaso: No lo temas. Cada error te enseña a enfocarte mejor la próxima vez.
¿Miedo a dar el paso?
Sí, es el indicador de que estás a punto de dar el salto. De la distracción a la concentración.
Boost para mejorar tu concentración:
Cambia tu entorno: Si tu espacio está lleno de distracciones, tu mente seguirá ese camino. Hazlo minimalista.
Físico a digital: Usa herramientas digitales que promuevan la concentración. Apps que bloqueen distracciones, por ejemplo.
Ejercicio: Sí, moverte mejora la concentración. Es ciencia.
Nutrición: Lo que comes afecta cómo piensas. Más agua, menos azúcar.
No dejes que el ruido externo nuble tu concentración. La verdadera batalla está en tu cabeza. Domínala, y el mundo digital, con todas sus distracciones, será un juego de niños.
Te dejo la fuente donde he aprendido en estos años y que me han inspirado a hacer esta edición.
Esencialismo, la disciplina de perseguir menos, Greg Mckewon
Cómo no hacer nada: Resistirse a la economía de la atención, Jenny Odell
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Que tengas una feliz semana.
Pavel 👋